¡Cuanto dolor dejaste con tu partida!
La conmoción, el miedo, la desesperación, la culpa y la pena fueron inmensas.
Sentimientos de poca valía, incapacidad y nula autoestima se hicieron presentes también.
¿Quién diria que después del maremoto, hoy te daría las gracias?
Por el regalo de la independencia, la autonomía, la libertad, el reencuentro conmigo misma y la tranquilidad.
Gracias por haberte ido.
Mil gracias mas por jamás, jamás regresar.
martes, 4 de agosto de 2009
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que bonito recital o poema...
ResponderEliminarnose por que no apareces en los sitios donde partcipo pero que se va a hacer...
en finn que he puesto en mi blog sentimientos cuando tocaba guitarra
besoos y cuidate(Y)
Ni es recital ni poema.
ResponderEliminarSe lo digo a Fru de corazón.
Me ha encantado. Espero yo también poder decir algo así algún día...
ResponderEliminarBesos!